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Al final del año, siempre nos invade la sensación de querer mejorar. Hacemos nuevos propósitos y, dentro de ellos, usualmente nos preguntamos qué es la felicidad, para después convertirlo en parte de la lista de objetivos futuros.

Me di la tarea entonces, de buscar un par de guías que aclararan el panorama, sobre la realidad de este concepto. En el presente artículo trataré directamente el libro de “Los mitos de la felicidad”, escrito por Sonja Lyubomirsky. Con este desenmarañaremos lo que sabemos, o creemos que sabemos, a través de 7 propuestas claves en la obra literaria.

¿Qué es la felicidad? Combatamos los mitos sobre este concepto

Adaptación hedonista

Este fenómeno es denominado por la autora, como la subestimación de los éxitos, y la exaltación de las desgracias. Encontrarnos en esta circunstancia representa un obstáculo, porque no podemos ver la realidad de la situación. Al “adaptarnos a las relaciones, trabajos y riquezas nuevas”, dejamos de ver la gran recompensa que estas nos otorgan, con el paso del tiempo. Por eso, cuando sucede algo negativo, lo hacemos sumamente grande, sintiéndonos como si nos ahogáramos en un vaso de agua; viéndolo en perspectiva, la mayor parte de las veces no es tan grave.

El Sistema Inmunológico Psicológico

Tomando en cuenta el concepto anterior, debemos traer a flote al sistema inmunológico psicológico. Este tiene la capacidad de ver las ventajas, en una situación aparentemente negativa. Cuando obtenemos el rechazo de un trabajo, nuestra mente se llena de culpas, enojos y reproches, tanto a terceros, como a uno mismo. Sin embargo, podemos decidir qué hacer con esas emociones: ¿Dejaremos que nos controlen? ¿Las tomaremos para hacer de esta circunstancia algo benéfico? Tomar decisiones apresuradas tiene a ser contraproducente, por eso, debemos darnos el tiempo para meditar el entorno, y cómo actuaremos en respuesta.

Seré feliz cuando…

Hablemos de los propósitos que nos pusimos el año pasado, ¿quién no pidió más dinero, fortuna, o un “trabajo ideal”. Pues bien, el problema es que condicionamos la felicidad. De aquí, cuando no obtenemos el resultado deseado, es más fácil que entremos en crisis. Esto sucede frecuentemente, hasta en la alta dirección. Se dieron cuenta que, a un año del cambio de trabajo voluntario, la satisfacción se desploma, porque le ponemos toda la responsabilidad de nuestra felicidad, a un simple puesto de trabajo. La solución se encuentra en ir en retrospectiva; recordar cómo era nuestro puesto anterior y por qué no nos gustaba. Después, encontremos las ventajas que tenemos ahora.

Vivir feliz, aún con dinero “estrecho”

Mientras usemos el dinero inteligentemente, todo va a marchar en orden. Si ahorramos, invertimos, y gastamos nuestro dinero conscientemente, la sensación generada será positiva. Lo importante no es la cantidad, sino la estrategia de uso, porque hasta un “rico” sentiría emociones negativas, si de pronto tuviera menos que el de a lado. El punto es relacionarnos fluidamente con la economía. “Reparte el consumo en pequeñas dosis, y separadas”.

Prográmate para sentir gratitud

Basar nuestra felicidad en aquello que deseas, y no en lo que tienes, te culparás constantemente, porque siempre habrá nuevas necesidades que combatan la felicidad que sentías, al obtener eso que tanto deseabas. Disfrutar de aquello que tenemos ahora, nos ayudará a vivir en constante felicidad, sea cuales sean las circunstancia. Cuando llegue algo nuevo, lo apreciaremos en gran media, y no colgaremos de ahí nuestra dicha.

Vinculaciones interpersonales

A esa idea de familia, como tal, se le adjudica demasiada presión. Una vez que tenemos la familia, ya somos felices, ¿y en los momentos complicados? Ver una relación como una meta, es destinarla al fracaso, pues armamos expectativas entorno a ella, que a veces no se cumplen de la forma deseada. Entonces, si vemos nuestras relaciones amorosas, de familia, amistades, o con colegas, como un flujo continuo, apreciaremos los momentos buenos y también los difíciles. De esta forma, no lo programamos para terminar, porque buscamos ideas nuevas para emocionarnos, para seguir enamorando a la otra persona, para darle momentos felices. Llevar un diario o bitácora de las vivencias, memorias, momentos buenos, y malos, harán que le quitemos carga a los negativos.

Condicionar la felicidad a eventos aislados

¿Dejarías de ser feliz si no cumples tu meta de jugar en “x” equipo de beisbol? ¿Y si tu pareja tiene pelo negro en vez de rubio? ¿Qué tal si te fracturas un dedo? Cuando suceden estas cosas, lo mejor es procesar las emociones, sentirlas, y ponernos en acción. Porque si lo dejamos todo en negativo, se convertirá en un círculo vicioso. Reconocimiento – acción, esa es la relación para salir adelante. Una de las recomendaciones del libro, es pasar tiempo con la naturaleza, pues nos invita a la reflexión, de aquí, darle peso a las satisfacciones del día a día, que a la vez iluminan nuestra vida. Por tanto, esto atrae más cosas buenas.

Los mejores años de la vida

¿A qué le llaman los mejores años de la vida? Qué y cómo queremos vivirla depende, en su mayoría, de nosotros, ¿entonces por qué declarar que solo serremos felices cuando seamos adolescentes y no en nuestros 30, 40, 50? Cada etapa tiene sus mieles, y es lo que se debe tomar en cuenta. A los 15 quizás podíamos equivocarnos a diestra y siniestra, porque estábamos en pleno desarrollo, a la edad adulta. Sin embargo, a los 28 se siente hermoso ver cómo tenemos mayor control sobre nuestras decisiones, y que lo aprendido sirve enormemente, que vemos el amor tan magnífico y racional como debe ser, en fin. Y así, si vivimos lo que queremos y sentimos, sin ponernos “pero”, seremos viejos felices, pues habremos hecho las cosas por nosotros, sin entregar nuestra vida a cosas banales.

Después de resumirte las claves principales del libro, te invito a detectar tus acciones diarias, sobre estas creencias. Cuando ejercemos la felicidad como estilo de vida, y no lo separamos de nuestro cargo profesional, hacemos sinergia, y entonces producimos y actuamos con muchísima mayor eficiencia.

Espera la parte dos, sobre la búsqueda de felicidad, basada en la obra de Tal Ben-Shahar.

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