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¿Cómo saber si el estrés me está afectando? Esta es una pregunta común entre las personas que perciben un desbalance en algún en el ámbito personal o laboral y que con el tiempo ha permeado en su salud.

Si esto resuena contigo, es momento de hacer algo al respecto. El problema grave quizás no es el dolor de cuello, o el nerviosismo momentáneo, sino las consecuencias a futuro que esto conlleva. Entonces, ¿cómo detectarlo y cómo solucionarlo?

Según el portal médico MedlinePlus, hay 12 signos con los cuáles puedes darte cuenta si tu cuerpo está padeciendo mucho estrés.

  • Dolores frecuentes.
  • Pérdida o aumento rápido de peso.
  • Dolor de cabeza.
  • Pérdida de memoria.
  • Rigidez en cuello o mandíbula.
  • Diarrea/Estreñimiento.
  • Insomnio o dormir demasiado.
  • Malestar estomacal, agruras o acidez.
  • Cansancio crónico.
  • Falta de energía.
  • Falta de concentración.
  • Uso de sustancias alcohólicas o drogas para relajarse.

Haz un análisis en tu día a día, ¿detectas alguna de estas señales? Es importante poner atención, porque en esta etapa se puede solucionar de forma más sencilla, que cuando se deja avanzar el problema. Podrás tomar antiácidos, relajantes musculares, o pastillas para dormir; sin embargo, la mejora será momentánea, pues no se está atacando el problema de raíz.

Evita padecimientos severos mas adelante. La depresión, la ansiedad, problemas hormonales, obesidad, insuficiencia cardiaca, diabetes, entre otros, podrían cobrar facturas grandes de no atenderlos a tiempo.

¿Cómo saber si el estrés me está afectando? Ahora que conoces los signos, es hora de actuar.

La buena noticia es que, con acciones simples, podremos combatir el estrés diario y con ello una mejora general en nuestro estilo de vida.

  • Ejercicio: Libera endorfinas en el cuerpo para mejorar el estado de ánimo, mejora la calidad del sueño, desarrolla seguridad en uno mismo.
  • Reduce la cafeína en tu dieta: Tomar café en la mañana es una práctica común, pero la ingesta de éste, algunos tipos de té, chocolate y bebidas energizantes alteran el sistema nervioso, creando mayor ansiedad.
  • Escribe: Mientras anotar los pendientes del día siguiente libera la mente para poder dormir mejor, escribir un diario de emociones nos ayuda a entender mejor lo que estamos sintiendo. De esta forma ordenamos nuestras ideas y damos paso a la resolución de problemas.
  • Date tiempo de descansar: La eficiencia y productividad incrementan cuando estamos bien descansados. Por eso, incluye periodos de relajación a lo largo del día, en los cuales te permitas alejarte del trabajo diario.
  • Practica el mindfullness: A través de la meditación logramos conectarnos con nosotros mismos de una manera profunda. Sin embargo, también es importante dedicarles tiempo a cada cosa. Por ejemplo, evita comer mientras trabajas, o usar el celular si vas al baño, hablar por teléfono mientras haces ejercicio, por nombrar algunos.

Recuérdalo, cuidarte a ti mismo ayudará a desenvolverte mejor en todos los aspectos de tu vida. La grandeza empieza con el amor propio.

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