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El estrés laboral es causante de serios problemas emocionales y de salud a nivel mundial, por tal motivo, no es solo un tema interesante del cual hablar, sino que se ha vuelto imperante tomar acciones y medidas para que los niveles de estrés dentro de una empresa disminuyan.

Para comenzar quisiera aclarar que no todo estrés es negativo. Todos los seres humanos llegamos a sentir un grado alto de ansiedad o estrés ante situaciones, en los que debemos estar alerta y prepararnos. Por ejemplo, si tienes una junta con accionistas o tienes que hablar frente al público, tu cuerpo va a reaccionar y va a generar en ti un cierto nivel de ansiedad o estrés para que puedas responder a aquello que tu organismo está entendiendo como una situación en la que tiene que adaptarse. Sin embargo, si estos niveles de ansiedad se mantienen altos aún pasada la experiencia, implica que estamos frente a un problema que puede derivar en patologías físicas o mentales. Nuestro cuerpo no está adaptado para soportar un nivel alto de ansiedad y estrés de manera prolongada, sería como mantenernos en un estado de alerta todo el tiempo. Por tal motivo se comienza a desgastar nuestro cuerpo y mente.

Es importante aprender primero a reconocer cuándo estamos en una situación de estrés y cuando no, para entonces poder gestionarlo. Ya sea llevando a cabo acciones en el momento en el que lo sentimos, pero también tomando acciones preventivas.

Existen trabajos y puestos más estresantes que otros, es importante para mantener el estrés bajo control, ya sea realizando actividades de tu agrado, que resulten relajantes y que te hagan sentir feliz. 

Actualmente muchas personas ocupan la frase “estoy estresado” aunque realmente no lo estén, o sólo sea un estrés circunstancial. Existen varios factores fuera del trabajo que también pueden generar eso, como por ejemplo, el tráfico. Puedes detectar si estás en un nivel de estrés constante si te irritas con facilidad, padeces de insomnio, te sientes cansado todo el tiempo, te sientes ansioso o triste, si pareciera que nada sale bien, comes de manera irregular (comes mucho más  o mucho menos que antes), no terminas lo que comienzas, por mencionar algunos síntomas. Si reconoces algunos en ti, es importante que tomes acción y realices actividades que te ayuden.

Puedes prevenir el estrés teniendo un tiempo fuera del horario laboral para hacer cosas que te emocionen, que te gusten y disfrutes haciéndolas. Estos momentos van a lograr relajarte y poner en perspectiva todas aquellas situaciones que durante la semana te mantuvieron estresado. Con un tiempo a la semana que sea sólo tuyo, puede ser suficiente. 

Las actividades más recurrentes que logran combatir y prevenir el estrés son: salir con amigos, ir al cine, tener un momento fuera de lo cotidiano con tu pareja, hacer ejercicio, jugar con tus hijos o sobrinos, los masajes relajantes, leer o escuchar música. Cuando decidas hacerlo, dedica tu tiempo exclusivamente a eso.

Hombre de negocios estresado

Si has realizado alguna o varias de estas actividades de manera recurrente y observas que el estrés no cede, entonces es momento de buscar ayuda profesional, pues es posible que tu nivel de estrés haya subido a tal grado que esté afectando de otra manera a nivel mental y entonces necesites de un experto para ayudarte a tratarlo.

Tú puedes ayudar a que se genere un mejor ambiente en el trabajo y en casa, tanto para ti como para las personas que te rodean. Sólo debes comenzar por observarte a ti mismo, ser honesto y tomar acciones a tiempo.

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